La tercera noche de preliminares fue la mejor de lo que llevamos de concurso. Water Closet y "Otro quinto por favor" destacaron en una noche de altibajos.
Yo No Salgo, dan guerra.
A pesar de ser guerreros que buscan la paz, Yo No Salgo viene dispuesto a dar guerra y lo hace a través de sus letras.
Golpe al nacionalismo en el primer pasodoble y crítica al carnaval en el segundo, algo que no suele faltar en esta murga. Buenos cuplés y un popurrí marca de la casa.
Han mejorado musicalmente y presentan un repertorio muy equilibrado. A pesar de todo esto, le faltó un paso más para estar a la altura de las dos grandes de la noche.
Presentarán nueva batalla en semifinales con seguridad.
Ahora es cuando, no salta la valla.
Sobre el escenario en segunda posición la granja de "Ahora es cuando". Toro, vaca, cerdo, pollito... no faltaba animal. Pero a la actuación si que le faltaron cosas.
Los pasodobles se hicieron largos y los cuplés no consiguieron la reacción del público.
Su mejor momento llegó en el popurrí, mucho más divertido y con buenos puntos como la cuarteta del "pollito pío".
En su primer año de concurso (a pesar de que algunos de sus componentes ya habían participado en ediciones anteriores) han roto el hielo. Que sirva de aprendizaje. Mientras, disfrutaremos de ellos en la calle, porque energía y ganas de hacer reír no les faltan.
Los Water son unos genios.
Que los Water son unos genios es algo que no es nuevo en los últimos años de concurso, pero es que este 2019 se presentan sobre el escenario representando a ilustres personajes como Darwin, Da Vinci o Einstein.
Pasodobles de preliminares, a pesar de ser de gran nivel como es habitual en esta murga. Muy buenos los cuplés, especialmete el primero a la gente que se ofende por todo y un estribillo que la gente ya intentó memorizar.
Son los maestros del popurrí y ayer lo demostraron con cuartetas como la del número PI o la diferencia entre como lo ven ellos y como el resto.
Los Water son candidatos a ganar el concurso por segundo año consecutivo.
Las Murguer no salen del callejón.
Tras el descanso salían a escena las MQueen, como ratas callejeras. Es una lástima que no aprovechen las voces que por momentos se aprecia que tienen. A su actuación le faltó garra y ganas de comerse el escenario. Esto se tradujo en un silencio incómodo entre el público, al que no le llegó su actuación.
Pasodobles críticos, el primero de ellos utilizando una metáfora entre ratas/gatos y políticos y el segundo en repulsa a las "manadas".
Es poco probable que repitan pase en semifinales pero habrá que escucharlas en la calle porque estamos convencidos que esta murga gana en distancias cortas.
A La Mascarada le coge el toro.
La Mascarada montó una plaza de toros en el escenario, ya que este año son forcados portugueses.
Grata sorpresa en la presentación, que defienden con energía, y en el primer pasodoble, donde hacen un repaso agradeciendo a todos aquellos que les recibieron en el Carnaval de Badajoz. Acostumbrados a sus años de crítica enfadada, este giro se agradece.
Durante el popurrí, tienen bastantes altibajos y en ocasiones hacen uso excesivo del "teatro".
Han mejorado con respecto a los últimos años aunque siguen sin alcanzar el nivel de sus ediciones más recordadas como el repertorio de matanceras.
Ramón pide un quinto pero bebe en copa.
En último lugar se presentaban la mezcla de Los Niños y Los Murallitas que este año son; "otro quinto por favor". La mitad son camareros (los músicos cocineros) y la otra mitad clientes, Ramón para ser más concretos.
Excelente presentación, en la que hacen un claro retrato del personaje a la vez que incluyen referencias locales como cuando aluden a los políticos que van a su restaurante.
Pasodobles con su estilo peculiar, diferentes sin duda, el primero a los sillones de un hospital y el segundo a Franco.
Dos buenos cuplés rematados con un estribillo que no está a la altura del resto del repertorio.
Sensacionales en el popurrí, destaca la cuarteta del "var".
Ramón puede reservar mesa para otras dos cenas y quien sabe, si para una cena extra.
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